Por Inmaculada de los Santos Cuesta Bertomeu. Académica Numeraria de la Real Academia de Ciencia Veterinarias de Andalucía Oriental.

Afortunadamente muchas mujeres hoy en día somos veterinarias, y trabajamos en las múltiples facetas que muestra nuestra profesión en servicio a la sociedad. Pero esto no fue siempre así y el comienzo para algunas mujeres que querían estudiar y luego ejercer la profesión veterinaria no fue nada fácil para ellas.

No sé si conocías que algunas mujeres para estudiar veterinaria tuvieron que matricularse con nombre falso de hombre, cómo le ocurrió a una angloirlandesa para poder acceder al examen de ingreso en el New Veterinary College de Edimburgo a finales del siglo XIX. O que a primeros del siglo XX se recogían noticias en los periódicos como The Times reafirmando la negatividad a que las mujeres fuesen veterinarias.

En España, en 1916, una mujer llamada Juliana Vidal Rodríguez intentó matricularse en los estudios de veterinaria sin éxito, escribió incluso a los presidentes de los colegios provinciales pero la solicitud fue desestimada. En el ambiente de aquella sociedad, los veterinarios consideraban que la mujer no tenía aptitudes físicas para ser veterinaria.

También hay que considerar que el Código Civil de 1889, recogía que la mujer no tenía identidad propia y tenía que estar bajo tutela del hombre.

Ya en 1925 “la bella e inteligente señorita María Cerrato Rodríguez”, recogido así en la Revista de Higiene y Sanidad Pecuarias de ese mismo año, obtiene el título de veterinaria por la Escuela de Veterinaria de Córdoba, matriculada en la modalidad libre pero sometida a dificultades no solo académicas sino familiares. Tengo que resaltar que esta mujer falleció en 1981 a los 84 años, ¡no hace tanto tiempo de ello!

Una mujer luchadora y muy adelantada a su tiempo puesto que ya recogía en su discurso -En los Discursos profesionales pronunciados en Santiago de Compostela el 25 de agosto de 1929 con motivo de la X Comida Veterinaria (Boletín Oficial de Colegios Veterinarios de Galicia nº 1929)- lo siguiente muy de actualidad en estos momentos:

“Sueño y soñaré siempre, aunque sea una visionaria, con nuestra regeneración social completa. Que el veterinario se equipare socialmente al médico y al farmacéutico y en la Reforma Universitaria se ha debido gestionar que las Escuelas se incorporen a la Universidad, considerándolas Facultad, máxime habiendo actualmente en Veterinaria un personal tan bien documentado en el profesorado, en la milicia, en las inspecciones, en la vida profesional libre, en suma en todos sus sectores”.

Fuente:

https://es.scribd.com/document/489878097/Maria-Cerrato-Rodriguez-Semblanzas-de-una-pionera#

Aprovecho esta alusión a la Facultad de Veterinaria de Córdoba para indicaros que con motivo del 175 Aniversario (1847-2022) están a disposición videos de la época sobre agricultura y ganadería de gran interés sobre las excursiones de los alumnos a diversas zonas. En particular, se ha recuperado una grabación sin sonido sobre una excursión a Marruecos liderada por el profesor D. Rafael Castejón y Martínez de Arizala en 1934 (para quien no lo asocie hay una estatua en la entrada en la antigua Facultad de Veterinaria de la Avenida Medina Azahara). Es de interés resaltar que durante apenas unos segundos aparece una mujer estudiante, de la cual no existiría más rastro en todo el video. Os dejo el enlace a estas joyas de la filmografía andaluza https://175aniversariofaveuco.es/videos/.

Se fueron sumando otras mujeres más, tras la reforma en 1931 de Félix Gordón Ordás, cuando las asignaturas de herrado y forjado pasaron a ser optativas. Pero muchas de aquellas mujeres pioneras no ejercieron sus carreras debido al ambiente social reinante sobre esta cuestión. Si estas interesado en saber más sobre otras veterinarias y las curiosidades publicadas en la época te invito a leer mi discurso de ingreso el 2 de diciembre de 2022 como Académica Numeraria de la Real Academia de Ciencias Veterinarias de Andalucía Oriental titulado Consideraciones históricas de la veterinaria y la mujer en el ejercicio de la profesión “De hippiatros, medicus pecuarius, medicus veteri o veterinarius a la actualidad” que en breve será publicado en los Anales de la Academia.

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